El popular músico inglés descansa por estas horas en Luque en la previa del show que ofrecerá el domingo en el Yacht. El viernes dejó un rato la tranquilidad de su hotel para escaparse -solo- a conocer Asunción.
Por Jorge Coronel
El jueves pasado llegó al país Steven Patrick Morrissey, conocido simplemente como Morrissey, para el show que estaba previsto inicialmente para este sábado. En la tarde del viernes, la producción local anunció una reprogramación del concierto, que pasaba al día domingo por las condiciones climáticas previstas por Meteorología.
El ex cantante de The Smiths -conocido por su radical postura vegana- cuenta con un cocinero encargado especialmente de prepararle sus distintas opciones gastronómicas. Apenas instalado en el país, sus asistentes personales se encargaron de chequear la comida y aprobaron el menú ofrecido a lo largo de su estadía.
Tras postergar el show previsto para hoy, parte del equipo de músicos y técnicos del artista decidieron agendar para esta tarde una visita al estadio del Defensores del Chaco para observar el partido de Olimpia-Santaní, aunque difícilmente el músico se despegue de su suite en el Hotel Bourbon. Sin embargo, en la noche del viernes, el polémico artista sorprendió con un pedido muy particular: en un momento se escapó del cuarto y, a bordo de un taxi, dio un vistazo a la ciudad de Asunción.
Fuentes cercanas a la organización mencionaron a ABC Color que el entorno del cantante aceptó sin mayores problemas la reprogramación del show. «Fueron muy buena onda para querer pasar para el domingo por el clima,no hicieron problemas por nada; lo cual es mejor, no solo por el clima sino también por los partidos de fútbol».
Sin embargo, todos saben que el humor de Morrissey puede alterarse con un factor muy puntual: cualquier venta de productos cárnicos -o derivados- en las inmediaciones del Yacht podrían afectar su realización.
Por ese motivo, no fueron pocos los fans que divulgaron en las redes sociales un expreso pedido de la venta de productos como hamburguesas, lomitos o panchos. «Señores lomiteros y afines: no arruinen nuestro sueño. La venta de carne en los alrededores del Yacht y Golf Club puede ocasionar la suspensión del evento por parte del artista». Un motivo que también preocupa a la producción, considerando la cancelación de shows del músico por esa misma razón en distintas ciudades del mundo.